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  • Foto del escritorAlex Garcia

El Corazón

El corazón Impulsa a la conciencia a que tome buenas decisiones o malas decisiones.


Marcos 7:21-23 nos da trece señales de lo que impulsa un corazón cuando no hay temor de Dios, cuando no se le ha entregado el corazón a Dios no podemos decir que una persona es buena, ya que el corazón natural es quien de decide escoger que es bueno y que es malo y todo ello a causa del pecado del primer Adán. Génesis 3:5 Dios bien sabe que, cuando ustedes coman del fruto de ese árbol, serán iguales a Dios y podrán conocer el bien y el mal.


Es importante entender que Dios tiene emociones por que también tiene un corazón, y nosotros fuimos creados a su imagen y semejanza. Dios dijo de David que era un hombre conforme a su corazón. Para poder llegar a tener un corazón conforme al de Dios debemos entregárselo a Él y descontaminarnos de todo pecado, no podemos vivir conforme al estándar humano sino que debemos conocer el corazón de Dios para hacer su voluntad y estar a la medida y estatura del varón perfecto. Efesios 4:13

En realidad no importa que tan buenas obras realiza una persona si no le ha entregado su corazón a Dios, por que solo por las obras no se puede determinar si alguien es bueno. Y allí

esta el error de muchas personas que se equivocan y se dejan llevar por el corazón humano, catalogándose a sí mismos o a otros como “buenos” solo por sus obras.


A través de la vida de David tenemos un gran ejemplo para reflexionar y poder descubrir como el lo hizo y saber en que momento se quebrantó su corazón, así como él pudo identificarlo y ser honesto dice en el Salmo 51 “En pecado me concibió mi madre”.

Es importante que puedas hoy descubrir en que momento se quebrantó tu corazón, ya sea por el rechazo, el dolor, la soledad ... Un corazón que transmite emociones dañadas puede llevarte hacia el pecado a pensar que puedes discernir entre el bien y el mal.

Hoy puedes ser humilde, responsable y permitir que el Espíritu Santo te examiné para que pueda descontaminarse y despojarte de todo aquello que te aleje de Dios y entender que esta decisión no es solamente para tu propio bien sino para las generaciones venideras.

Dios no quiere descalificarnos sino todo lo contrario, él quiere limpiarnos y crear en nosotros un corazón sano y puro.


Pastor Alexander Garcia


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